jueves, 6 de enero de 2011

El buen ciudadano en twitter



Las redes sociales ofrecen la oportunidad de generar cada día múltiples interacciones entre gran cantidad de personas y conformar por si mismas un dinamismo y estilo con personalidad propia. Quienes participan en más de una red social electrónica, saben que las reglas de juego de cada una, si bien pueden ser parecidas, en el fondo son muy diferentes. Particularmente en twitter, donde conviven más de 93 millones de personas (hasta Junio 2010) y diariamente se envían más de 50 millones de tweets (números a Febrero 2010), la interacción se conforma mediante una serie de símbolos y significados que van consolidando cada día más a la comunidad twittera, y moldea un estilo particular de interrelación entre sus miembros.

Mantener comportamientos específicos y seguir determinados patrones pueden permitir una mejor calidad de interacciones y participación dentro de esta sociedad 2.0. Algunas claves se parecen a las siguientes:

  • No importa la condición social ni status del mundo real dentro de "la dos punto cero". Las reglas que rigen el timeline son diferentes a las que imperan en la calle. Si bien el nombre y rol social puede ser una carta de presentación, con el tiempo somos atrapados por la dinámica propia de la red, en la cual los roles son diferentes y las interacciones son más planas. Todos tienen posibilidad de emitir comentarios, opinar y responder, independientemente de quienes sean los emisores o receptores. Los que entienden este concepto, disfrutan mucho más, mientras quienes se aferran a su status en el mundo físico tratando de extrapolarlo a su red social, suelen causar controversia y disminuir su influencia.
  • La información veraz moldea la credibilidad. Constantemente aparece información en la red sobre acontecimientos que deben ser verificados -así como la fuente- antes de hacerse eco de rumores. Con el tiempo, informaciones incorrectas debilitan la credibilidad y pueden crear angustia o matrices de opinión que dañen la reputación de terceros.
  • Acumular followers no es un deporte. Algunos fijan como meta obtener gran cantidad de seguidores, incluso comparándose con otros al utilizar esta referencia como una especie de "standard de calidad". Al igual que con otros tipos de relaciones, realmente es la calidad de las mismas y no la cantidad la que brinda la oportunidad de obtener beneficios mutuos en la comunicación. Muchas fuentes ofrecen servicios para obtener más seguidores, ofertas de seguidores a cambio de reciprocidad, e incluso hay quienes reprochan el hecho de que no los sigan. Mientras más seguidores se tienen, y mientras más personas se siguen, la comunicación se va volviendo más compleja, masiva y se pierden espacios personales. La capacidad de profundizar cada contenido es mucho menor, mientras que la posibilidad de encontrar diferencias aumenta y se queda más expuesto a las matrices de opinión.
  • Todo lo que se escribe en el timeline pasa a ser del dominio público. Los límites entre la vida privada y la vida pública son definidos por cada persona. Hay quienes son muy celosos con informaciones íntimas, mientras existen personas que son más abiertas y describen situaciones de su vida que probablemente otros nunca harían. Sin establecer juicios de valor, lo importante es saber que en el momento en que se publica la información, la misma será consumida por todas aquellas personas que la lean, causando reacciones incontrolables, impactando la privacidad y seguridad de la persona y su entorno.
  • Los 'stalkers' (acosadores) no son bien vistos. Escribir constantemente a una persona, preguntarle sobre datos personales o mostrarle que se lleva un perfecto registro de sus actividades dentro y fuera de la red puede causar incomodidad e incluso miedo. La confianza es fundamental para determinar el tipo de relación que se construirá en twitter y los límites de la misma tienen que ser acordados -formal o informalmente- por ambas partes.
  • Twitter no es muy eficiente cuando se utiliza como chat. Los mensajes publicados en el timeline entre dos personas conversando sobre temas personales pueden volverse fastidiosos. El resto de lectores estará fuera de contexto y considerará irrelevante la información o incluso, en algunos casos, podría interpretarse como una diferencia en el trato con personas específicas.
  • Lo cortés no quita lo valiente. El tipo de lenguaje utilizado es parte de la imagen que transmitimos a la red. El trato amable a nuestros contactos, saludar y responder individual o de forma general las preguntas que nos realizan, escuchar las críticas o solicitudes (sobre todo cuando se trata de cuentas empresariales) y agradecer las comunicaciones, marca el tipo de nombre que se va construyendo. De igual forma es importante concienciar que cierto tipo de expresiones puede resultar ofensiva para algunas personas, al igual que comentarios sobre determinados temas. A la hora de controversias, siempre existen respuestas adecuadas para mantener un argumento y defender una posición.
  • La solidaridad conecta al mundo. La posibilidad de ayudar a las personas es ilimitada. Bien sea ofreciendo una respuesta oportuna ante algún problema planteado, retransmitiendo una solicitud de ayuda, escribiendo algo que informe o simplemente ofreciendo una palabra que haga reflexionar o sonreir a otros, la comunidad interconectada se desarrolla a medida que cada uno de sus integrantes aporta su grano de arena para el beneficio de los demás.


Al final, el uso responsable y creativo de este medio permite que cada uno pueda establecer un rol participativo dentro de la comunidad 2.0 y convertirse en un buen ciudadano!

2 comentarios:

  1. Excelente post :) interesante en verdad

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  2. No me acostumbro a las redes sociales. No me gusta, me resulta extraño, cambiar mi sociabilidad real.

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